martes, 25 de enero de 2011

Gaysaber

La poesía son heridas abiertas en el alma.
La poesía es un viento destructivo que se apodera del espíritu de algunos que elige, entre los hombres.
Va de hombre en hombre destruyéndolos por dentro.
Los versos sangran.
Sangra su voz y su palabra.
Eso es la poesía.
Te tortura hasta que ya no puedes adiestrarla y se hace con tu vida.
Eso es la poesía. Y te das en holocausto a su ara milenaria. Eso es la poesía.
Terrible condición del alma.

He leído a aquellos que sufrieron y dejaron abiertas las puertas de su estado. Esos constructores de mundos. Pagaron con su sangre y con su vida.

Yo no me considero poeta. Ninguno de vosotros lo sois, porque el estado de la poesía os habría poseído y habríais dejado de ser vosotros mismos, solo envoltorio de un ser inenarrable.
Tal vez cuando muera, con mi último suspiro, pueda crear... mi primer verso.

Pero no por ello dejaré la cruzada irracional, la búsqueda del alma. Pues sé que con las palabras araño la matriz en que me inscribo. Con las palabras vacías de mi pluma. Poco a poco, desciendo hacia la sombra y el abismo. Es un viaje que nadie ha de comprender mientras ocurra, un viaje que tal vez nunca termine, un viaje amargo y anhelante. Es un viaje en el que lo que descubrimos sigue formando parte de lo desconocido.

2 comentarios:

  1. Brutal.

    Sigue buscando sin pensar en cuando llegará el primer verso. Tal vez te sorprendas si te das cuenta de que llega antes de la muerte, o incluso, ya ha llegado.
    Cada uno tiene su forma de ser libre.

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  2. Espero que lo que descubra sea parte de lo desconocido, ya que solo así podré seguir buscando.

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